El 56° Congreso de la Unión Internacional de Abogados (UIA) en Dresde, Alemania, nos llevó a muchos colegas del mundo a participar con letrados norteamericanos que vivían una campaña electoral en su país con mucha tensión.
En efecto, los activistas de los grandes partidos que disputaban la Casa Blanca, demócratas y republicanos, lanzaron millonarios presupuestos en sus campañas presentando sus planes de trabajo para los próximos cuatro años.
Se trataba nada menos que de la campaña presidencial en el país quizá más poderoso del planeta, sobre todo por la influencia política que –efectivamente– ejerce Estados Unidos en todo el mundo.
La presencia en esta oportunidad del huracán 'Sandy', que azotó con furia el este del país del norte, interrumpió las actividades del candidato Barack Obama, quien ejerciendo la presidencia de la República asumió sus deberes de jefe de Estado ante la catástrofe que presentaban varios estados debido al ataque de la naturaleza.
Para poblaciones que dependen de la electricidad, no contar con tal servicio no solo impedía el funcionamiento de las oficinas, sino la vida habitual de los ciudadanos.
Una delegada norteamericana en Dresde mencionó en su ponencia que esta situación, resultado del accidente de la naturaleza, los obligaba a pensar en posibilidades extremas, en el caso de que poblaciones enteras quedasen totalmente aisladas, como en una guerra mundial.
Lo curioso de su participación es que afirmó que gran zona del país es rica y puede resolver los problemas, asumiendo los propios damnificados los costos de los daños.
Por supuesto que la mayoría de viviendas está asegurada para estas contingencias y por ello cuando son evacuados solo sacan lo indispensable, documentos, fotos, diplomas. Las demás cosas se recuperan.
La campaña en sí presentaba como opuestos a dos líderes de programas con bastantes diferencias. Los triunfadores demócratas proponen en economía el salvataje de las fábricas de automóviles, que dan trabajo.
En la fiscalización defienden los derechos de la clase media; en educación recogen los reclamos de los sindicatos de educadores para realizar profundos cambios en la calidad de la enseñanza.
En defensa se preocupan de su rol en Europa, Asia, Pacífico y en lugares claves del mundo; en salud, Obama ofrece fortalecer la reforma del sistema de salud, que inició en 2009, a favor de las mayorías.
En cuanto al problema migratorio, se han comprometido a trabajar para evitar la clandestinidad de hombres y mujeres y los trabajos esclavizantes a los que son sometidos, por falta de oportunidad.
Felizmente pasó el huracán, se reinició la campaña y tuvo lugar la votación con récord de concurrencia, teniendo los ciudadanos norteamericanos el derecho voluntario de votar.
Se trata de un récord histórico, que ha fortalecido los votos del Colegio Electoral, ya que la votación es indirecta. En este caso el triunfo de Obama goza de grandes simpatías y despierta renovadas esperanzas en el mundo
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