SOBRE SANIDAD BIBLICAMENTE

 

Jesús es el Señor de mi vida. La enfermedad y la dolencia no tienen poder sobre
mí. Yo soy perdonado y libre de todo pecado y culpa. Estoy muerto al pecado y
vivo a la justicia. Colosenses 12. 21,22.
Jesús llevó mis pecados en su Cuerpo en la cruz; así que estoy muerto al pecado
y vivo en Cristo y es por sus llagas que yo soy sanado y completo. 1 Pedro 22.
24; Romanos 6:11; 2 Corintios 5: 21.
Jesús llevó mis enfermedades y llevó mi dolor. Así que no le doy lugar a la
enfermedad o al dolor. Por que Dios envió su Palabra y me sano. Salmos 107:20.
Ninguna maldad vendrá sobre mí, ni ninguna plaga se acercará a donde yo habito.
Porque Tú has enviado a tus ángeles a que me cuiden. Ellos me guardan en todos
mis caminos dándome vida, sanidad, y salud. Salmos 91: 10, 11; Proverbios 12:28.
Jesús tomó mis enfermedades y mis dolencias. Así que me recurso a permitirle a
cualquier enfermedad a que domine mi cuerpo. La Vida de Dios fluye a través de
mi trayendo sanidad a cada fibra de mi ser. Mateo 8:17; Juan 6:63.
Mi cuerpo es el templo del Espíritu Santo. Así que le ordenó a mi cuerpo a que
suelte los químicos correctos. Mi cuerpo está en un balance químico perfecto. Mi
páncreas produce la cantidad apropiada de insulina para vida y salud. 1
Corintios 6:19.
Protuberancias y tumores no tienen derecho en mi cuerpo. Son cosas del pasado
porque yo he sido liberado de la autoridad en oscuridad. Colosenses 1: 13,14.
Cada órgano y tejido de mi cuerpo funcionan en la perfección que Dios los creo.
Le ordenó a mi cuerpo que funcione correctamente en el Nombre de Jesús. Génesis
1:28,31.
Tú Palabra es manifestada en mi cuerpo, provocando la desaparición de
protuberancias. La artritis es cosa del pasado. Demando a mis huesos y
coyunturas a funcionar apropiadamente en el Nombre de Jesús. Marcos 11:23; Mateo
17:20. 118
Gracias Padre por darnos un corazón fuerte. Mi corazón late al ritmo de la vida.
Mi sangre fluye por cada célula de mi cuerpo restaurando y trayendo vida y salud
en abundancia. Proverbios 12: 14; 14:30.
Las palpitaciones del corazón son normales. Mi corazón late al ritmo de la vida,
llevando la vida de Dios a través del cuerpo y trayendo vida y salud en
abundancia. Juan 17:23; Efesios 2:22.
Le ordeno a cada célula de sangre que destruía cualquier enfermedad, germen, y
virus que trate de habitar en mi cuerpo. Le ordenó a cada célula de mi cuerpo a
que sea normal en el Nombre de Jesús. Romanos 5:17; Lucas 17: 6.
Yo le ordeno a mis coyunturas a que funcionen perfectamente. No habrá más dolor
o inflamación en mis coyunturas. Mis coyunturas rehúsan cualquier cosa que les
cause dolor o destruya su función normal. Proverbios 17:22.
Tú has perdonado todas mis iniquidades; Tú has sanado todas mis enfermedades; me
has redimido de la destrucción; Tú has santificado mi boca con cosas buenas para
que mi juventud sea renovada como las águilas. Salmos 103: 2-5.
Tú me has dado vivida en abundancia. Yo recibo esa vida a través de tú Palabra
influida por cada órgano de mi cuerpo trayendo sanidad y salud. Juan 10: 10;
Juan 6:63.
Yo he sido redimido de la maldición. Gálatas 3:13 por mi corriente sanguínea.
Fluye a cada célula de mi cuerpo, trayendo vida y salud. Marcos 11: 23; Lucas
17:6. Mis aflicciones se van y no vuelven nunca. Nahum 1:9.